Las anheladas vacaciones habían llegado. Teníamos dos semanas por delante para descubrir en un roadtrip en familia el norte de España.
Día 1 del Roadtrip por el norte de España
Viernes 10 de julio de 2015, cargamos la furgo y salimos de Barcelona en dirección Monzón. Llegamos al área de AC con tiempo para preparar la cena y antes de ir a dormir, aprovechamos para hacer un paseo por la ciudad y tomar un helado para refrescarnos, ¡la ola de calor se hacía notar!
Día 2 del Roadtrip por el norte de España
Al día siguiente por la mañana llegamos hasta el bonito pueblo de Alquezar; es una villa medieval pequeña, preciosa y muy bien cuidada, todas las casas están rehabilitadas. Pero la razón de venir hasta aquí era la Ruta de las Pasarelas dentro del Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Güara. De pasarelas como tal hay pocas pero la ruta es bonita y muy entretenida para hacer con niños; al nuestro le encantan los puentes, las escaleras, las cuevas, saltar…
Después de comer fuimos a la piscina de Alquezar a ponernos en remojo; la piscina pequeña estaba vacía y pudimos jugar con el agua como nunca. La verdad que el bebe lo disfrutaró muchísimo. Después una duchita y a seguir ruta hasta Lumbier (Navarra).
Dormimos en Lumbier mucho más fresquitos que en Aragón.
Día 3 del Roadtrip por el norte de España
Y al día siguiente bien temprano fuimos hasta el parking de pago (2€) de la entrada de la Foz de Lumbier; donde está prohibido pernoctar como nos dejó clarísimo el encargado; Llegó después de nosotros y antes de decir buenos días, ya me estaba insistiendo en que no se podía dormir allí… Tampoco era nuestra intención 😛
La ruta de la Foz de Lumbier es muy corta y el terreno es ideal para hacerla con peques. Hay un par de túneles excavados en la roca, el bebe con el frontal estaba entusiasmado, hay también muchas aves y es bonita de recorrer. Creo que no llega a los 6 km. que se pueden alargar, algo que no apetece demasiado, bajo el sol de justicia en esta época.
Teníamos que continuar con la ruta que esta vez nos llevaba a la provincia de Burgos, la zona se denomina Merindad de Valdivielso. Concretamente en la población de Valdenoceda donde también hay una ruta con pasarelas, el Desfiladero de los Hocinos.
Aparcamos en una zona como de picnic muy chula y viendo que todavía era pronto y ya no hacía calor, decidimos hacer la excursión la misma tarde; puesto que la de la mañana había sido muy light. Esta ruta es parte del GR99 que recorre todo el río Ebro. Solo hay 2 pasarelas en todo el recorrido y a pesar de que tiene todos los ingredientes para ser una ruta fantástica: río, desfiladero, sombra… La carretera pasa por el otro lado del río y el ruido de los coches le quitan todo el encanto. Por lo tanto, bajo nuestra opinión, es prescindible; te puedes hacer una idea desde la carretera y venir hasta aquí solo para esta excursión, no merece la pena.
Día 4 del Roadtrip por el norte de España
La próxima parada fue ya en Cantabria y aquí sí que nos maravillamos; la razón, la Cueva El Soplao, una cavidad increíble; enorme, y eso que solo se visita una pequeña parte de los 20 km que hay descubiertos. Lo tienen muy bien montado, el juego de luces y música hace la visita todavía más espectacular. La explicación de la chica acaba de darte todavía más motivos para la fascinación. Está llena de estalactitas, estalagmitas y excéntricas; la cantidad es estratosférica, hecho que la hace única en el mundo por cantidad y también por calidad de conservación. Solo hace 10 años que está abierta al público.
La entrada de adulto son 12 € y resultan muy bien invertidos. Para entrar dentro de la cueva se coge un tren (aquí ya conquistan a los más pequeños); y el resto de la visita se hace andando con una temperatura muy agradable con la chaqueta puesta. Dentro está prohibido hacer fotos, por lo tanto, estas están extraídas de la web, donde encontraréis toda la información necesaria para conocer esta magnífica cueva. También hay una opción de visita aventura, para mayores de 12 años; tiene muy buena pinta, así que tendremos que volver como máximo de aquí en una década 😉
100% recomendable
El entorno también acompaña, las vistas desde el aparcamiento de la cueva son también de postal; aprovechamos para comer y jugar un poco con los skates en el asfalto del aparcamiento.
Seguimos la ruta para entrar en el principado de Asturias, donde haremos el mayor número de excursiones.
Día 5 del Roadtrip por el norte de España
La primera era la famosa Senda del Cares, como son 12 km de ir y 12 más de volver. Evidentemente con el peque era imposible realizarla entera; teníamos que decidir si empezábamos desde Poncebos (que nos quedaba más de cerca y nos ahorrábamos bastantes kilómetros de furgo) o desde Caín, desde donde dicen que es más bonito el recorrido y más espectacular, a pesar de que la carretera de acceso no es fácil. La incógnita la resolvimos pensando en el bebe; cuando tienes hijos tienes que priorizar y renunciar, ya volveremos en otra ocasión; pero ahora decidimos lo mejor para él, es decir, menos km atado a la sillita de la furgo.
Llegamos a Poncebos que no es ni pueblo, dos hotelitos y para de contar; Seguimos hasta donde se empieza la excursión pensando que se podría dormir; pero la chica de la caseta de información nos dijo que estaba prohibido, porque estábamos dentro del Parque Nacional de los Picos de Europa; Nos recomendó retroceder 2 km, hasta un aparcamiento habilitado donde sí se permite la pernocta. Habiendo leído todas las críticas que tiene la zona de Asturias por multas a furgos por dormir en cualquier lugar, hicimos caso a la chica y decidimos dormir en el parking. Antes de instalarnos, bajamos hasta el último pueblo Arenas de Cabrales a hacer algunas compras y jugar en el parque infantil.
Ya en el parking todavía tuvimos la visita de algunas cabritas antes de pernoctar.
Día 6 del Roadtrip por el norte de España
Al día siguiente por la mañana nos levantamos temprano para encontrar aparcamiento al inicio de la ruta y hacerla sin el sol a pleno rendimiento.
La senda está bien, pero es tan famosa que quizás nos esperábamos algo más… o quizás sí que la zona de Caín es mucho más espectacular; en todo caso, la aproximación desde Poncebos se hace dura para el peque, a través de un camino pedregoso con bastante desnivel; pero una vez estás en el propio desfiladero, el camino es bastante ancho para andar dos personas sin peligro; te puedes cruzar con alguna cabrita también, pero nada grave.
Evidentemente, extremando precauciones y cuidado con los peques, siempre de la mano o en el portabebes. En las horas que la hicimos nosotros nos cruzamos con cuatro gatos; a la vuelta sí que es cuando empezaba a andar el resto de la humanidad. Las comparaciones siempre son odiosas, pero hay otros congostos más interesantes des de nuestro punto de vista com la Carança o Mont Rebei.
Tiene que haber gustos para tod@s 😉
Ahora tocaba un poco de lagos, así que fuimos hacia los Lagos de Covadonga. El acceso hasta arriba (que está regulado en época de vacaciones: + info aquí) es duro para nuestra furgo. Tanta subida la hace sufrir pobre, pero después de esquivar vacas y ciclistas, una vez arriba la panorámica es fantástica. Pasamos la tarde estirados en la hierba contemplando centenares de vacas y caballos.
Hasta que fue la hora de ducharse… en el albergue nos insistieron que pusiéramos la furgo detrás del edificio, donde el desnivel era evidente y a la hora de hacer la maniobra para girar la furgo, dijo que no subía; de espaldas y hacia arriba, dijo que no.
Así que esta es la anécdota del viaje. La gente del refugio, ausente, lo único que nos dijo el responsable es “Bajo tú responsabilidad”, gracias.
Bueno, fue un rato estresante, porque no sabíamos qué hacer, la furgo estaba encallada y no sabíamos como sacarla de allí… nos saturamos un poco, pero finalmente, optamos por la única opción que teníamos, que era sacarla por delante; A pesar de que no estaba habilitado para que pasara ningún coche, no nos quedaba ninguna alternativa.
Así que el papa-conductor se llenó de coraje y tió por el derecho; poquito a poco por miedo a volcar, puesto que el desnivel a dos ruedas era considerable y sumado a la altura de nuestra furgo… pero finalmente conseguimos salir aún y la poca confianza de la gente del refugio; que una vez la teníamos bien aparcada, nos la hicieron volver mover a otro lugar y fue cuando acabamos de decidir marcharnos. Con gente así, nosotros no nos gastamos ni el dinero ni el tiempo.
Nos dirigimos hacia Cangas de Onis donde finalmente pernoctamos.
Día 7 del Roadtrip por el norte de España
Al día siguiente hicimos un paseo, jugamos en el parque infantil y nos dimos una buena ducha en las piscinas municipales. La siguiente parada fue a Soto de Agues, una población minúscula repleta de flores de colores desde donde empieza la Ruta del río Alba. Esta excursión tampoco es espectacular, está bien pero le falla el terreno que es casi asfalto, para los pies del bebe es ideal pero le resta mucho encanto.
Para dormir nos acercamos a Pola de Laviana donde tienen Área de AC con skatepark incluido. Mientras unos cocinan la cena los otros estuvieron haciendo “pinitos” con el skate.
Día 8 del Roadtrip por el norte de España
Al día siguiente era hora de tirar hacia un pueblo llamado El Pino para conocer las Foces del río Pino. Esta excursión es dura, el desnivel para llegar a las foces es considerable y el peque, cuando hace tanta subida pide rápido subir a espaldas; y para quien lo portea, todavía se hace más duro. Una vez en el desfiladero, la estampa es bonita pero el duro camino de llegada te hace dudar si realmente merece la pena… También se puede llegar al río Aller, pero nosotros estábamos rendidos y decidimos dar media vuelta.
Desde aquí nos dirigimos hacia Tuñón y dormimos en el área Recreativa de Buyera desde donde se puede empezar la Senda del Oso; Nosotros no la hicimos, no nos gusta comulgar con este tipo de espectáculos con animales.
Día 9 del Roadtrip por el norte de España
Al día siguiente aparcamos la furgo en el parking del área Recreativa de Las Xanas e hicimos el Desfiladero de las Xanas. Está considerado el “mini-Cares” más que nada por la longitud; porque este solo hace unos 6 km. Pero poco tiene que envidiarle a la gran Senda del río Cares; es una bonita ruta que discurre por el desfiladero del río Trubia y que acaba en un bosque húmedo fantástico. Aquí también se ven cabritas, se tienen que atravessar un par de túneles excavados en la roca y tiene todos los alicientes para ser una ruta preciosa y recomendable.
Después de la caminata fuimos a la ducha del centro de btt donde comimos y pusimos rumbo a Navelgas. Es un pueblo sin encanto pero tiene Área de AC y al día siguiente queríamos hacer las Hoces del Esva. Finalmente después de equivocarnos de ruta y chuparnos una pendiente con un desnivel desorbitado, desistimos y marchamos sin conocer estas Foces.
Comimos, mientras unos descansaban los otros jugábamos en los prados y finalmente continuamos el viaje hacia Galicia. Este era el ”objetivo”, llegar a Galicia y finalmente pasábamos Ribadeo para entrar en tierras gallegas. La primera parada obligatoria fue en la Playa de las Catedrales; como era media tarde y la marea estaba alta no podíamos apreciar los detalles de esta preciosa playa; así que hicimos un paseo por las plataformas habilitadas de madera por alrededor de los acantilados. Hicimos también la reserva on line del acceso gratuito para al día siguiente en horas de marea baja. Este dato es importante, se tiene que mirar el horario de las mareas para el año en curso para poder bajar a la arena y andar entre las formaciones de roca de la playa. Y también es imprescindible hacer la reserva de entrada on line aquí.
Queríamos cenar un arrocito en Rinlo pero la cocina se abría a partir de las 21:30h más el rato de prepararlo quería decir que empezaríamos a cenar casi a las 10 de la noche; y de momento, esto es incompatible con nuestro horario infantil. Así que desistimos, cena furgonetera (que por cierto, ya hemos probado de hacer pizzas con paella y quedan de miedo) y a dormir. Antes pero el Sol nos regaló una puesta de sol preciosa solo comparable con la salida del día siguiente por la mañana, espectaculares, verdad?
Día 10 del Roadtrip por el norte de España
Después de dormir al lado del mar con el ruido de las olas del Cantábrico de fondo, fuimos bien temprano hacia el aparcamiento de la Praia as Catedrais.
Siendo domingo, nos temíamos una gran procesión de gente; la marea indicaban que estaría en su punto más bajo sobre las 13h pero es recomendable ir un par de horas antes.
Nosotros, como que no teníamos nada mejor a hacer, a las 10 de la mañana ya estábamos allí; todavía no había nadie y el padre de la criatura se pudo dar un bañito en solitario a las aguas del Océano… hasta que vino un socorrista a avisar del peligro de las corrientes marítimas y la multa de 3.000 € por bajar la perra a la arena de la playa.
Evidentemente, nos esperamos arriba, pero para evitar malos entendidos, fuimos a dejar a Lüa en la furgo y bajamos hacia la arena con los zapatos de río; que son muy recomendables para descubrir esta playa única.
Hay lugares que tienes que pasar por encima de las rocas, hay algas y patina mucho; con chanclas normales es fácil que te caigas porque hay bastante agua en algunos tramos; así que la mejor opción son los zapatos estos de neopreno de río.
Una vez en la arena disfrutamos muchísimo la visita; nos gustó mucho, el bebe disfrutó como nunca en la playa, la aventura de ir descubriendo rincones y cuevas, de andar entre peces, de encontrar cangrejos, de subir a cuestas cada vez que el agua le llegaba a zonas sensibles…
La verdad que a primera hora no había mucha gente y pudimos hacer muy buenas fotos sin actores secundarios, fue fantástico. Antes de las 12 ya estábamos de vuelta y ahora sí que estaba a tope. Normal que regulen el número de personas que accede ¡porque es una locura!
Así que, en resumen, entrada anticipada, horario de mareas, 3 horas antes y chanclas de río 😉
La ruta seguía hacia Lugo, donde hicimos el campo base en el área de AC; y nos dejamos guiar por unos familiares que veranean allí desde hace años. Paseamos por la muralla, por el casco antiguo, nos hartamos de pulpo y descubrimos el racho, buenísimo!
Día 11 del Roadtrip por el norte de España
Después de Lugo, nos diriguimos a Pedrafita do Cebreiro, jolin qué lujo de Área de descanso, con ducha y todo! Todas tendrían que ser así! Al día siguiente por la mañana se levantó el día muy nublado y caía un poco de agua vaporizada; aun así, subimos hasta O Cebreiro un pueblecito típico que nos habían recomendado. Alucinamos de la cantidad de gente que había, estaba lleno de adolescentes que deberían de estar de campamentos… Todavía se conservan las típicas “pallozas” (que en descripción de la Wikipedia, son: construcciones tradicionales de planta circular o óvalo, de entre diez y veinte metros de diámetro; con paredes bajas de piedra y cubierta por un tejado cónico vegetal, normalmente formada por tallos de centeno; puede acabar en cumbre o rematar en cúspide) que recuerdan épocas pasadas o tradiciones de países lejanos.
Día 12 del Roadtrip por el norte de España
Aquí ya empezaba el camino de vuelta hacia casa, km y km de carretera por delante. Hicimos parada en León, en Burgos y en Lleida y finalmente, después de recorrer unos 2.800 km llegamos a casa.
Felices de todas las experiencias vividas y todos los increíbles lugares que habíamos podido conocer. Y como siempre, con ganas de volver y conocer tantos otros a los que no tuvimos tiempo de ir.
Cuéntanos ¿qué parada imprescindible nos recomiendas en una ruta por el norte de españa?
Aquí tienes el mapa con el recorrido que hemos hecho en esta ocasión por si puede servirte:
